domingo, 23 de mayo de 2010

¡ERES COMO UN PERRO!

¡Eres como un perro, buscas su olor por cualquier parte!
En cuanto lo encuantras, mueves la cabeza hacia todas las direcciones intentando encontrarlo.

El cerebro humano es asqueroso, capaz de almacenar cualquier código, de perfumes, de lineas, de sonidos, de imágenes, e incluso, de recuerdos.

Entonces aparece cupido, con su estúpida flecha que se clava hasta lo más hondo de tu corazón.
El hombre queda embrujado, incapaz de olvidar todos los códigos.


-¡Parece que todavía estás loco! ¡Imbécil!
-Amor es lo que me hace enloquecer.
-Una marioneta ¡eso es lo que eres!